Desde 2019, Salvador ha estado reemplazando sus farolas incandescentes por luces LED como una de las iniciativas dentro del Programa “Iluminando nuestro Barrio”. Esta iniciativa ha llegado a 100 de los 163 barrios de Salvador y 75,000 postes en Salvador tendrán iluminación LED a finales de 2020. La Oficina de Alumbrado Público (DSIP), un departamento de la Secretaría Municipal de Orden Público de Salvador, lidera el Programa. Esta iniciativa tiene muchas ventajas en términos de eficiencia lumínica y energética. Reduce el consumo en un 50%, mejora la calidad y durabilidad, y aumenta la sensación de seguridad en los barrios.
Reemplazar las lámparas por iluminación LED hace que el sistema de alumbrado público sea más eficiente ya que pueden llegar a las 50 a 100 mil horas de funcionamiento, mientras que otro tipo de lámparas rondan las 30 mil horas. La iluminación LED tiene una eficiencia luminosa hasta cinco veces mayor que las luces incandescentes. Esto hace que los costos de mantenimiento sean mucho más bajos ayudando al Gobierno Municipal a disminuir su tarifa de consumo de energía. Al mismo tiempo, dado que las luces LED son más potentes para iluminar las calles, también ayudan a reforzar la seguridad pública y mejorar la visibilidad de los peatones por la noche. Además, las luminarias LED son fáciles de controlar a través de un sistema de gestión remota, lo que reduce los costos operativos y evita las emisiones de CO2 de los viajes en automóvil a los polos.
Según el director de Alumbrado Público de Salvador, Júnior Magalhães, el programa cambió el concepto de alumbrado público en la ciudad al promover la democratización y modernización de la iluminación de barrios enteros, incluso algunos de los barrios más periféricos, llevando la luz LED a todos calles y callejones, incluida la instalación de nuevos postes. El programa no se inició en barrios ricos, sino en barrios vulnerables, donde suele haber un mayor índice de problemas relacionados con la violencia. El alumbrado público aporta, además de la calidad de vida, una mayor sensación de seguridad para quienes transitan por las calles de noche.
El proceso para reemplazar las luces LED comienza con un estudio de campo realizado por los equipos de DSIP para comprender las necesidades de cada ubicación. Esto incluye la cantidad de luces y los requisitos de instalación para garantizar que todo el vecindario y sus habitantes reciban un alumbrado público adecuado. Además, el Gobierno Municipal emite avisos públicos para la compra de artefactos de iluminación a través de registro de precios para reducir costos y poder llegar a más colonias.
- Beneficios
- Medio ambiente
- Social